miércoles, 13 de junio de 2007

Plan 9 from Outer Space


Este es el principio de la nombrada "peor película de todos los tiempos", escrita, dirigida y producida por el "peor director de todos los tiempos", el inefable Ed Wood, Jr.

A pesar de su nula capacidad técnica y artística (o más bien gracias a ella), Ed Wood ha pasado a la historia, sobre todo gracias a la ayuda de uno de sus fans mas fieles, Tim Burton, que realizó una película sobre su vida protagonizada por Johnny Depp, Martin Landau (que obtuvo un ÓscarTM de la Academia por este papel) y Sarah Jessica Parker (si, la de Sex and the City).

Ed Wood consideraba que el éxito de una película radicaba en las estrellas que tuviera en su reparto, pero como nadie quería trabajar con sus pésimos guiones, rescató a una estrella totalmente apagada que había conocido tiempos mejores: Bela Lugosi. Lugosi era un actor de origen transilvano afincado en Hollywood tras haber cosechado gran fama haciendo de drácula en películas de terror. Una vez dejó de hacerse cine de terror clásico y dejaron de llegarle papeles, cayó en la adicción a la morfina. En esa situación fue cuando Ed Wood le conoció y le ofreció papeles en todas sus películas, casi siempre haciendo de doctor loco o de vampiro. La única película en la que no hace uno de estos dos papeles es Glen or Glenda (donde Ed Wood da rienda suelta a sus fantasías transformistas), donde el personaje interpretado por Lugosi es incomprensible por su falta de sentido.

En un post anterior me referí a la interpretación de Bela Lugosi en Plan 9 from Outer Space entre comillas. Esto es debido a que Ed Wood rodó un plano mudo del señor Lugosi antes de tener financiación para realizar la película (antes incluso de tener un guión o una idea de lo que iba a ser). Cuando esta financiación al fin llegó (de la mano de la Iglesia Baptista de Hollywood), Bela Lugosi hacía tres años que había muerto y el papel que debía haber sido para él está interpretado por el quiropráctico de la mujer de Wood, que no se parece en nada a Bela y que no habla y mantiene siempre la mitad de la cara tapada con una capa. Para intentar que el público se crea que ese señor de la cara tapada es Lugosi, el film comienza con el plano mudo rodado hacía tres años, y que no tiene relación alguna con el resto de la película, contribuyendo a incrementar el surrealismo que destila desde la propia concepción de su argumento (extraterrestres que llegan a la tierra y se dedican a resucitar a los muertos en forma de zombies gracias a un rayo que lanzan desde sus platillos volantes).

El problema de las películas del director maldito no es simplemente un mal guión, unos medios precarios o unos actores pésimos, sino la desidia con la que están rodadas y montadas: parece que toma al espectador por imbécil. Por ejemplo, en la película que da título al post, los planos diurnos y nocturnos se alternan sin sentido (están todos los actores en un cementerio por la noche, y al plano siguiente es de dia y nadie parece haberse dado cuenta. Tampoco importa, al plano siguiente vuelve a ser de noche). El director abusa del metraje de stock (planos rodados en ciertos sitios que posteriormente quedaban a disposición de los directores para intercalar entre algunas escenas), quedando una narración totalmente surrealista (impagable el plano de los cañones del ejército disparando cuando los platillos volantes empiezan a destruir una maqueta mal hecha de Hollywood).

El Hollywood de cartón-piedra y lujo simulado de los años 40 y 50 tenía muy poca paciencia con los mediocres, hasta el extremo de destrozarles moralmente. Ed Wood no pudo resistir sus continuos fracasos y murió, completamente alcoholizado, en 1978, cuando contaba 54 años. Aunque es cierto que no tenía talento alguno y que sus películas son en ocasiones insultantes, era un verdadero amante del séptimo arte, llegando a sacrificarlo todo por conseguir su sueño: ser director de cine.

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