lunes, 17 de diciembre de 2007

Sentir la música


¿Se puede "sentir" visualmente la música? The Music Animation Machine opina que sí, y probablemente tiene razón.

Vía La Maldición de Sísifo.

1 comentario:

Pedro Pergamo dijo...

Vaya, no se si leerás esto desconocido bardo Zhalin el Ilusionista, pero ya que he empezado lo termino y ahí va, estaba haciendo un comentario a un post (¿se dice así no?, no soy experto en esto) de “Neuromancia” y de pronto algo me ha hecho consultar la fecha del post por si acaso pues no la había mirado y mis peores sospechas se han confirmado, el texto era de 2006, y el blog estaba inactivo desde agosto del 2007 con un último post que me ha emocionado mucho y el otro blog al que remitías también está inactivo desde hace casi un año, apenas tres meses después sin comentario de despedida esta vez, pero ahí siguen ambos, testimonios del que eres, ¿eras?, pero esperando aún que alguien (yo por ejemplo) los lea…

Vaya entonces este mensaje hacia ti o al viento que ahora mismo arrecia España y que traslada por el aire “fuerzas mentales” invisibles pero muy reales para decirte que creo que si ahí siguen es porque son parte de ti aunque ese no seas ya tú, vaya pues a ese que fuiste, a esos que fuiste y sobre todo al que ahora eres pues todos ellos son, seguro, un gran tipo. Un fuerte abrazo.

Y ahí va el comentario que pensaba dejar (en http://neuromancia.blogspot.com/2006/11/cadenas-de-bsqueda.html) antes de darme cuenta de que me dirigía a uno de esos que fuiste y al que siempre supongo siempre debes estar agradecido, sobre todo por haber errado y haberte enseñado tanto:

“Pues nada, sólo comentarte que acabo de conocer tu blog, y me ha interesado bastante lo que dices y sobre todo como lo dices y ya he aprendido (por fin) que mi intuición falla poco y ahora casi siempre le hago caso con lo que ya está en mis favoritos, concretamente en la carpeta "Blogs interesantes (consultar a menudo)" (ya ves, ordenado y disciplinado que es uno y que la cadena de búsqueda que me ha traído desde google ha sido precisamente "cadenas de búsqueda", pues hasta hace media hora no tenía la menor idea de que rayos eran (y como buen documentalista que fui -y supongo que no he dejado de ser- me ha picado la curiosidad al leer al respecto en otro de los blogs de esa carpeta donde ahora está el tuyo también: Peripatetismos 2.0) y no ninguna niña con pocas aficiones higiénicas ni su mascota. De forma pues que te confirmo que efectivamente es calidad y no cantidad lo que importa pues la cantidad es puro ruido de fondo para los que no soportan elegir de vez en cuando el hermoso silencio de la vida y la calidad es un corredor de fondo que acaba consolidándose y hasta generando su propia “cantidad” en las proporciones correctas y equilibradas… (y aquí me dio por mirar la fecha...)